Fría Redención

Incontables noches se anidan
en un par de ojos negros,
marcados por el dolor;
noches de lamento, gritos, lágrimas,
donde las mentiras se aparean gratamente,
buscando redención donde solo existe frío.

Y del cielo solo caen gotas.
Nadie para de llorar.
Solo queda callar,
por que nadie sabe si las estrellas siguen allí.
¿Es que a nadie le importa ya?
¿Aunque el alma de una princesa
esté sumergida en un mediterraneo de negrura
y confución?
¡Ella solo busca amor!

Al final, nada he dicho yo.
Porque nada supe,
nada sé,
y nada he de saber.
¿o quizás ya lo sé todo?...

Pero mi princesa ya no debe llorar.
Ya no debe llorar por amor.

No llores mas princesa.
Ten mi corazón y úsalo.
Sé felíz:
"Levántate y anda"

40 muertes solo el Domingo.

¡Qué decepción me da este país! Y no solo a mí, si no a todos los salvadoreños.
Ya tenía quizás una semana de no ver las noticias, y, cuando se me ocurre ponerlas ayer en la noche, escucho, de entrada, que solo el domingo hubo un total de 40 muertos... sí, CUARENTA MUERTOS SOLO EL DOMINGO... eso es mounstruoso: esas cifras no son dignas de ser dichas de una nación. Es verdad que El Salvador es un país en vías de desarrollo, pero, díganme: ¿es ese motivo para que surga la anarquía y el terrorismo? A mi criterio: contesto que no. Es totalmente injusto que se den tan altos índices terroristas (ya no delincuenciales), y que las autoridades competentes solo se conformen con decir: "-Estamos investigando, estamos investigando"...
¡Qué va! Todo comenzó con la toma de poder de Mauricio funes, actual presidente del país, y primero del partido protestante en la historia de la nación. Me parece que la ola delincuencial se desató con todo su poderío en mediadas del año pasado, precisamente cuando el ex periodista llegó al poder. Pero a la gente, por muy analfabetos que sean algunos, no se les engaña: todo esto es corrupción. Sí, corrupción del partido que abandonó el poder después de 20 años de tenerlo, y me refiero específicamente al partido ARENA... lo que ocurre, es que tienen contactos con los principales "Clicas" (o jefes de pandillas), y son ellos quienes han hecho que todo esto esté pasando: es una pena que utilicen a las personas como reenes, por que es eso, prácticamente, lo que están haciendo...

Pero no quiero profundizar en esto: solo soy un chico, indignado por estos aconteceres. El mismo domingo, un grupo de "terroristas" prendieron fuego a un microbus (buseta), PERO CON LOS PASAJEROS ADENTRO. Eso es imperdonable. Hubieron 13 muertos, y muchos quemados, entre estos NIÑOS. Me atrevo a decir, aunque sé que a muchos va a incomodar, que si existe un dios, pues que se muestre y haga justicia. Aunque no estamos en días en los que se pueda decir que con hincarnos y hablar en voz baja se van a solucionar estos problemas. Predico, con cierto grado de aceptación, que estamos en los albores de otra guerra civil en El Salvador, a menos que la situación se normalice, siquiera un poco; ya que la gente se está hartando, y va a querer hacer justicia por sus manos. ¡Qué caos este que vivimos!
Si El Salvador no crece en nada, es por que siempre va a seguir estancado en la violencia, que va de la mano con la corrupción...

Muchos están pidiendo pena de muerte para todos esos criminales, y yo me uno a estos. "Derechos Humanos" tiene casi toda la culpa de que nadie le tema hoy en día a la ley, y el judicial, de que nadie la cumpla. Si se tomaran la molestia de ver las guardias de los policías, verían que, mientras los pandilleros están asaltando a un pobre señor que regresa de trabajar, ellos están cuentiándose a toda mujer que pase cerca...
Son todos unos malditos... por culpa de ellos y su ambición nadie puede vivir en este país...

Me avergüenza decir esto de mi país, pero es la realidad que se vive aquí... Ojalá no pase y me toque algo a mí... ¡Qué pena da este país!
NO LO RECOMIENDO...

Cuídense...

¿Qué se traen?

Estoy empezando a hartarme de ciertas actitudes de algunos miembros de mi familia hacia mi persona... Me revienta que siempre me anden criticando, sobre todo, que lo hagan sin argumento. Me molesta mucho que digan y digan, pero que se molesten cuando yo contesto o me defiendo.
Me han tachado de: bohemio, haragan, vago, descuidado, tonto, inmaduro, mal educado, sucio, incompetente, estúpido, y otras palabras que por simple cuestión de ética no me propongo mencionar.

Confieso que no he escrito nada en varios días, por que me han restringido mucho el acceso a la web, además, hace algunos días, mi madre me dijo que dejara de escribir por que no era escritor, y que no invirtiera tiempo en algo "inútil" y que no me va a dar ningún tipo de frutos. Huy. ¡Qué cruel!
La verdad me asombró que mi propia madre me dijera eso, sobre todo por que sabe que he estado becado en la Universidad estudiando periodismo, y que, ya con las bases, cabe la posibilidad de encontrar un trabajo por el estilo. Me asombró y además tomé en cuenta que no era la primera vez que ella me subestimaba. Sí, tiene esa manía de creerme el peor estúpido sobre la faz de la tierra, y de creer que no soy capaz de nada, a pesar de que siempre he sido de los mejores en casi todo lo que hago... no sé que será: celos quizás, no lo sé.
el caso es que se molestan por todo: si se me ocurre decir algo, y dar mi opinión, basta alguna frase que diga para que me empiecen a buscar errores: es como si sus vidas se centraran en criticarme o en buscarme defectos. Se me ha ocurrido decirles que se preocupen mas por sus vidas y que me dejen tranquilo, pero, como se puede suponer, esto solo acarreó mas pleitos.
Lo otro: si me estoy callado para que no me digan nada, me critican de loco, por que según ellos, ando enojado: y no es así!!! Entonces es donde empiezan a provocarme, poniendo palabras en mi boca. Todo es horrible.

Se me están acabando las alternativas lógicas para arreglar este asunto. Pero creo que le estoy dando mas importancias de la que se merece. Bastaría con observar a cualquiera de mis amigas para darse cuenta que hay situaciones mas terribles que la mía... lo que yo vivo no es nada!
Pero igual me molesta que se empeñen tanto en criticarme...

Bueno, ya me he desahogado, prometo subir un nuevo cuento dentro de poco: talvez y sea mañana.

Gracias por escucharme un momento, ¿eh?.
Los espero. =)

La declaración.

"Eran como las 3:00 de la madrugada, y recuerdo que dormía tan plácidamete como esas veces en las que no te levantas ni al baño. Llovía a torrenciales, y la atmósfera era fría y pasada de neblina: las condiciones apropiadas para dormir de corrido una 10 horas.

Me despertaron los pasos de alguien que corría a lo lejos, y que gritaba endemoniadamente...
Como es de suponer, me levanté asustado y me refugié en la sala de mi casa, ya que la cercanía de mi habitación a la calle me ponía en riesgo si se trataba de una persecución con armas...
Me quedé allí, quieto, esperando y escuchando... Me puse frío.

Se percibía solo lo helado en la piel, y los gritos habían cesado. Quien corría se acercaba cada vez más, y por un momento, escuché que me nombraban... sí, recuerdo que una voz en el viento dijo mi nombre. Volví a todos lados, pero nadie mas que yo en aquella casa. Todo estaba oscuro. Empecé a dudar de la veracidad de aquellos gritos que había escuchado: ¿serían producto de mi imaginación?
Al pensar así, no tuve mas que volver a mi cama, ya que, misteriosamente, el ruido de pasos se había extinguido por completo, y el ruido de las gotas al caer reinaba de nuevo...
Pasaron unos minutos en los que la impresión de todo aquello no me dejó conciliar el sueño de inmediato, estuve pensando en todo, principalmente en cuando me pareció que me llamaban al oído...

Hice el mayor de los esfuerzos por desentenderme de todo aquel evento, y lo estaba logrando...
Pero, de repente, así de la nada, los gritos demoníacos volvieron, el que corría se acercó a mi casa, y el frío se intensificó de un manera horrible... nunca en toda mi vida había percibido una oscuridad tan grande como la de aquel día... Los pasos terminaron enfrente de mi casa... hubo un silencio prolongado, en el que los latidos de mi corazón se aceleraron de gran manera...
De pronto, fué como si un animal salvaje estuviera tratando de derribar mi puerta... La sacudían violentamente, con gran ímpetu, y con una fuerza incesante, mientras se coreaba mi nombre como en forma de súplica.
Me asusté mucho y sentí que sería mi fin... Recuerdo que pensé en mi madre, en mi novia, en mis amigos... pero fueron recuerdos rápidos, estaba demasiado afligido...
Estaba todo oscuro, y deduje que ir por un arma, que en todo caso sería un cuhillo, no serviría de nada, ya que aquel personaje poseía una fiereza que nunca había presenciado en mi vida... "Sí -me dije- es mi fín..."
Seguían llamándome a gritos y en modo de súplica... me pareció reconocer la voz de un vecino amigo. ¡Oh! eso bastó para quedar mas tieso que antes...
Pasaron minutos agónicos: el frío empeoraba, la negrura lo cubría todo, mi cerebro estaba congelado, y mi cuerpo no obedecía absolutamente ninguna orden, además, uno o varios hombres, estaban tratando de tirar mi puerta, y hacían un ruido espantoso y de crujidos metálicos...
1 minuto, 2 minutos, 3 minutos... Hasta que la puerta se rindió...
Escuché, quieto en mi cama, como claramente entraba un sujeto a mi casa a pasos pesados... respiraba profundo y agitado, por la fuerza hecha anteriormente...
Parecía un espectro, y su sombra era mas oscura que la misma negrura de la noche...
Se acercó a mí... todavía pienso que podía verme en lo oscuro.
Me miró con unos ojos azulados por cierto haz de luz escasamente visible...
Me miró con todo el frío acumulado en sus ojos...
Nos miramos y no tuve mas valor... cerré los ojos y me desmayé.

Desperté cuando ya había parado de llover, estaba yo en mi cama, acolchado, tibio, agitado y con el sol entrando por la ventana, dándo directo en mi rostro...
Me levanté rápidamente: mi puerta estaba derribada..."

Bién -dijo, incrédulo, el policía que le tomaba la declaración.

Pero hacía un frío impresionante. Fue la peor tormenta de la década... al menos así lo dijeron los noticiarios. ¡Que monzón el que cayó esa vez!

Ed bajo la lluvia.

Era aquel un día de esos en los que comienza a llover por la madrugada, y no se detenía hasta que las casuchas de los mas pobre se hubiesen hundido. Sí, estaba lloviendo y hacía un frío horrible. Sin embargo, Edward, que apenas tenía 10 años, salió a caminar con su felicidad de la mano, ansioso de mostrarle el aspecto de la ciudad cuando llovía de aquella forma...

O sí; anduvieron saltando en todos los charcos que se encontraban al paso, levantando gotas de todos los tamaños. Ed se mojó hasta mas no poder, pero como estaba demasiado a gusto con su felicidad, decidió seguir jugando, aunque fuera un rato mas...

Como siempre suele ocurrir cuando uno está contento, pasaron las horas a toda velocidad, como envidiosas de la alegría del niño; y Ed se había alejado demasiado de su casa, de la vista de su madre, quien solo por unos segundos se desentendió de él porque debía ir a prepararle algunas toallas para su entrada que se veía próxima...

Ed se había alejado porque estaba buscando contar las gotas que tan apresuradas caían del cielo, pero notaba que mas lejos caían mas, y debía acercarse para poder contarlas... su felicidad solo lo seguía, ya no le decía nada: ¿se estaría acabando?... ¡Infinitas muestras de egoísmo!

Mientras nadie lo cuidaba, un personaje desconocido se le apareció así, de la nada; y Ed se dió cuenta que su felicidad se había mojado tanto que se había convertido en miedo...

Su mamá muchas veces le había dicho que no debía hablar con los extraños, y se acordó de eso a la perfección, solo que, como es común en los niños pequeños, no obedeció:

-¿quieres jugar con migo? - dijo Ed, casi llorando...

Pero nadie contestó, quizás solo la bruma vestida de humo; y, pasados unos minutos, la mamá de Ed gritaba el nombre de su hijo bajo la lluvia, por que solo encontró a la felicidad sentada en un charco, y supo que era la culpable de que aquello hubiese pasado...

Ed ya no estaba, pero fué felíz...

La desesperanza III

Los sentimientos tienen un efecto tan fascinante en las personas, que consguen invadirla, y la hacen ver la realidad de una manera tan, pero tan SUBJETIVA, que la mayoría pueden llegar a creer que viven la "peor tragedia del mundo"; y es allí donde se presenta la imagen de un indeseado deseado: sí, la Muerte...

Si es verdad que todos llevamos el mismo destino; y que todos, de una u otra forma, estamos muriendo. Pero, ¿qué será esa creencia de que la única solución para todo es acortando nuestro tiempo de vida?

La muerte sí puede ser una vía de escape a todo; pero, simple y sencillamente NO ES LA SOLUCIÓN, a menos, que las circunstancias lo demanden, aunque cuando es así, a todos los suicidas les ataca el "vitalismo" (xD).

¿Porqué digo todo esto? Por que la Desesperanza, como toda cosa real en el mundo, tiene un final, y, ese final, como es de suponer, se trata de la muerte: tanto en forma de suicidio, como de homicidio...

El tiempo que debe transcurrir para que toda aquella tristeza se convierta en una idea macabra y una visión de la vida demasiado mezquina y pérfida, pues puede variar, y depende tanto de la persona como individuo y como ser social, tomando en cuenta los aspectos dentro de estas categorías.

Se me ha dado la oportunidad de conocer a gran cantidad de personas, y puedo asegurar, casi en un cien por ciento, que todos tienen una forma diferente de afrontar situaciones que los puedan llevar a una tristeza tan grande que les pueda causar Desesperanza, aunque se trate de 2 hermanos, o de una pareja de esposos... Supongo que ya había mencionado que el criterio se forma a partir de nuestra posición en la realidad, y que puede ser dócil y moldeable en algunos y testaruda en otros.

....

La Desesperanza es algo que todos, en algún momento dado, hemos sentido y hemos vivido (aunque algunos se pongan escepticos con esta afirmación), pero, por falta de un buen "concepto" (ver "La Desesperanza I) nadie, o casi nadie, logra identiicarla y la confunden con un millon de cosas mas.

Me atrevo abiertamente a decir que la desesperanza no es solo un sentimiento, o una forma de sentir: no, para nada, es mucho mas... La Desesperanza es algo así como un "estado físico". Pasajero en algunos, pero estable en otros...

Yo la catalogo como un estado físico, basandome principalmente en su accionar sico-emocional y todas las concecuancias de esto.

Hablando de Ahogados...

Para muchos suena estúpido, por ejemplo, que alguien diga algo como: "el que se ahoga se muere"...

Pues la verdad yo no puedo estar de acuerdo con eso. ¿Porqué? pues por el simple hecho de que el concepto de muerte que la mayoría tiene (y especifico: "mayoría"; porque no es de todos), es un concepto muy vago, muy tonto: solo arraigado a lo que dice una señora que vende fruta y cuyo hijo murió de difteria; o lo que nos dice un profesor inepto, tratando de demostrar lo (estúpidamente) filósofo que puede ser; o un sacerdote tratando de reducir nuestra autoestima hasta lo mas bajo con el fin de que nos humillemos ante un dios del cual se puede hasta llegar dudar después de un tiempo, luego de que todos pidan y no reciban nada mas que “mensajes de fe”; o bien un diccionario o enciclopedia que, por definir una cosa, mencionan otra aún mas compleja... Todo es detestable, absolutamente absurdo.

Pero no es de eso, sin embargo, de lo que quiero hablar ahora. Talvez después se me ocurra hacer un ensayo sobre: "Cómo no Crearse un Mal Concepto de Muerte". La cosa es que a veces las persona piensan que morir es el fin de todo, que allí se termina lo que conocemos, y que nunca volveremos a saber de nadie ni de nada... yo pregunto ¿alguien se ha tomado la molestia de morir, anotar lo que ve y siente, para luego regresar y testimoniarlo? pues yo pienso y estoy seguro de que no...

Nadie lo ha hecho ni va a pasar. Simplemente porque, para comenzar, es un “imposible” y temas de la muerte son tabú y está prohibido hablar de eso en forma seria. Solo se vale en poemas, y otros textos literarios…

No quiero caer en trivialidades. Pero la verdad es que si estoy escribiendo esto es solo para comprometer aún más a todas esas fuentes, tanto empíricas como “científicas", que brindan un concepto tonto de la Muerte...

Bueno, se me terminó el tiempo… Para terminar quiero decirles que yo algún día también me ahogué... y, aún estando muerto, me he tomado la molestia de romper el silencio de las sombras…

Dentro de poco, la Muerte ya no será tan temida como lo es ahora…

Solo soy un espectro obligado a vivir entre mortales por mis acciones en vida, pero es que simplemente uno llega a aburrirse...

Recuerdo que era profesor y hacía calor…